Fuente:Kimball citando Richards:1974:El Señor me ha dado sueños que para mí son tan reales y tanto de Dios como fue el sueño del rey Nabucodonosor

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George F. Richards: "El Señor me ha dado sueños que para mí son tan reales y tanto de Dios como fue el sueño del rey Nabucodonosor"

Spencer W. Kimball, citando George F. Richards:

El Señor ha revelado a los hombres por los sueños algo más de lo que [el presidente Kimball] nunca entendí o sentido antes. He oído más de una vez en las reuniones de quórum del Consejo de los Doce cuando George F. Richards era presidente. Él era el venerable padre del hermano LeGrand Richards que acaba de hablar con nosotros. él dijo,

"Creo en los sueños, hermanos. El Señor me ha dado sueños que para mí son tan reales y tanto de Dios como fue el sueño del rey Nabucodonosor, que era el medio de salvar a una nación de hambre o el sueño de Lehi, que a través de un sueño llevó a cabo su colonia del viejo país a través de la poderosa profunda a esta tierra prometida, o cualesquiera otros sueños que podamos leer en las escrituras.

"No está fuera de lugar para nosotros tener sueños importantes", dijo. "Y entonces, hace más de 40 años tuve un sueño que estoy seguro estaba de parte del Señor. En este sueño yo estaba en la presencia de mi Salvador mientras se levantaba el aire. Él no hablaba palabra para mí, pero mi amor por él era tal que no tengo palabras para explicarlo. Sé que ningún mortal puede amar al Señor como he experimentado ese amor por el Salvador a menos que Dios revela a él. Me hubiera quedado en su presencia, pero no había un poder me dibujo lejos de él.

"Como resultado de ese sueño, tuve la sensación de que no importa lo que podría requerirse de mis manos, lo que el evangelio podría conllevar a mí, me gustaría hacer lo que se les debe pedir que ver incluso con la fijación de mi vida.

"Por eso, cuando leemos en las Escrituras lo que dijo el Salvador a sus discípulos," En la casa de mi Padre muchas moradas hay; ... Voy a preparar lugar para vosotros ... para que donde yo estoy, vosotros también estéis. "(Juan 14: 2-3.) Creo que ahí es donde quiero estar.

"Si yo puedo estar con mi Salvador y tener esa misma sensación de amor que yo tenía en ese sueño, será la meta de mi existencia, el deseo de mi vida."[1]

Notas

  1. Spencer W. Kimball, "The Cause Is Just and Worthy," Conferencia General (April 1974).